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  • Foto del escritorPara alabanza deSu gloria

JESÚS SANA A UN SORDOMUDO

MARCOS 7


“Volviendo a salir de la región de Tiro, vino por Sidón al mar de Galilea, pasando por la región de Decápolis. Y le trajeron un sordo y tartamudo, y le rogaron que le pusiera la mano encima. Y tomándole aparte de la gente, metió los dedos en las orejas de él, y escupiendo, tocó su lengua; y levantando los ojos al cielo, gimió, y le dijo: Efata, es decir: Sé abierto. Al momento fueron abiertos sus oídos, y se desató la ligadura de su lengua, y hablaba bien. Y les mandó que no lo dijesen a nadie; pero cuanto más les mandaba, tanto más y más lo divulgaban. Y en gran manera se maravillaban, diciendo: bien lo ha hecho todo; hace a los sordos oír, y a los mudos hablar.”

Marcos 7:31-37

 

Hay una gran importancia del tipo de gente con la que nos rodeamos, quienes son nuestros amigos o conocidos, y que serían capaces de hacer por nosotros, en estos versículos podemos ver una vez más, como conocidos de alguien con alguna necesidad interceden por él con Jesús, en este caso una persona que no se podía comunicar adecuadamente y que, aunque quisiera no podía escuchar a Jesús. Cuando Jesús obra el milagro en él, lo hace de manera diferente, lo aparta de la gente, quizá para que el sordo pudiera prestar toda la atención en Jesús, y cuando lo sana no solo pronuncia con palabras la sanidad, sino lo hace con movimientos, Jesús toca sus oídos y su lengua, así la persona puede comprender lo que estaba pasando con ella. Jesús obra en nuestra vida de manera general, pero también lo hace de manera muy personal, cubriendo nuestras necesidades individuales.


Cuando Dios actúa en nuestra vida, lo hace de manera que nosotros podamos comprender que Él está obrando, y cuando nos ayuda lo hace integralmente, trata con nosotros no solo nuestras necesidades físicas, sino también nuestras emociones y nuestro espíritu, y cuando lo hace, lo hace bien; sin ninguna duda de que Él ha obrado, de tal forma que no nos podemos quedar callados, nuestra vida en sí, da testimonio de Aquel que nos ha transformado de criaturas a hijos de Dios. JESUS ES SEÑOR

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